El año pasado, mi madre, mi tía y yo fuimos a Seattle, Washington. Visitamos mi tío y primo que viven allí. Nunca he había allí, pero tan pronto como llegué, me enamoré con la ciudad.
Seattle es muy diferente que Illinois. Hay muchas montañas y bosques. Hubo arboles por todas partes, y siempre pudimos ver las montañas. La ciudad es más relejada como aquí. Muchas personas piensan que siempre llueve allí, pero cuándo estaba allí, era cálido y soleado. Cuando llegamos, hacía lluvia. Era muy suave porque mi tío vive en una montaña, y cuando condujimos a su casa, hacía nieve cerca de su casa. Él dijo que el tiempo es diferente en la ciudad depende de su locación. Fuimos a mercado de “Pikes” cuando hacía soleado. Era fantástico porque podíamos ver el hombre que tirar los peces. Hubo muchas tiendas suaves y restaurantes buenos. Nunca he comido tanto en un viaje en mi vida. En el mismo día que el mercado, fuimos al puerto para tomar un crucero. Vimos mecánicos muy diferentes, y aprendí que están para importadas cosas de países diferentes.
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